Atareado y lleno de distracciones, el modo de vida actual nos hace tener la sensación de estar siempre haciendo una cosa pensando en otra. En este escenario, tener atención plena en nuestras acciones es un regalo para el bienestar. Y esto puede ser conquistado por la meditación.
La inspiración para crear esta app surgió de un programa presencial para promover el bienestar y la reducción de stress creado por Natura en alianza con el Instituto Israelita de Enseñanza Albert Einstein, por medio de su Instituto del Cerebro, y por la Asociación Palas Athena.
Según Patricia Tobo, gerente científica de nuestra área de bienestar, a partir de la eficacia comprobada de la experiencia presencial – testeada por colaboradores de Natura y de Einstein- el objetivo fue crear el aplicativo para beneficiar el mayor número de personas.
“La idea es ofrecer una herramienta que va a auxiliar el manejo del stress y de la ansiedad, sentimientos inherentes a nuestro día a día atareado. Y, a partir de su uso incorporado en la rutina, tener más conciencia de esos estados emocionales y, consecuentemente, mejorar su calidad de vida”, afirma Patricia.
Meditación Natura
Con prácticas enfocadas en la respiración, relajación, el amor, alegría, empatía y mindfulness (atención plena, en traducción al español), nuestra investigadora Elisa Kosaza y la doctora Cássia Coelhoso, ambas del Instituto del Cerebro, dicen que el aplicativo ofrece la posibilidad de que las personas entren en contacto con la meditación de forma simple.
Según las especialistas, muchas personas se quejan de la falta de tiempo o de la disponibilidad para frecuentar un curso presencial. Ellas afirman que, considerando la cercanía y el uso de los teléfonos móviles, tener el aplicativo facilita el acceso a las prácticas meditativas.
A pesar de que reconocen la relevancia de iniciativas como Meditación Natura, Elisa y Cassia alertan que el software es un programa educacional para personas que quieren aprender estrategias, no un tratamiento o terapia.
Los beneficios de la meditación
De acuerdo con Fernando Stanziani, profesor de Palas Athena, las ventajas de meditar van más allá del control de stress o de fomentar la sensación de bienestar. Para él, la práctica ayuda a las personas a estar más conscientes a la hora de tomar decisiones.
Un gran beneficio es colocarnos en mayor conexión con la realidad y ser menos reactivos a lo que vivimos. La meditación nos ayuda a hacer lecturas más claras sobre dónde y cómo colocamos nuestra atención, lo que nos lleva a tomar decisiones más conscientes”, afirma Stanziani.
Es que, claro que no se trata de magia. La experiencia meditativa necesita ser parte de nuestras vidas e incorporarse a una rutina. Los especialistas comparan la meditación con la actividad física: solo conseguimos medir los resultados y alcanzar objetivos si nuestra práctica es regular.
Ningún cambio de hábito es fácil. Pero, en el instante que practicamos la meditación y percibimos que algo mejor después- como la relajación, la atención, la respiración- conseguimos incorporarla en el día a día. Es un desafío sentir el beneficio justamente en momentos de tensión, como al finalizar el día o antes de una reunión importante”, dice Patricia.
Cómo comenzar a meditar
El primer paso para comenzar es superar la idea de que meditar es no pensar en absolutamente nada y que nos va a liberar de nuestros pensamientos. Esa es una creencia falsa, ya que la meditación es la capacidad de mantener la atención enfocada en un objeto. Como entrenamiento, cualquier persona puede beneficiarse de ella.
Es un programa de 8 semanas especialmente creado para guiar al practicante durante el proceso y, de forma bastante simple, poder traer más equilibrio”, dicen Patricia y Cássia.
El tiempo de cada uno
Para Stanziani, el aplicativo funciona como apoyo, pero, después de algún tiempo (y cada uno tiene su propio tiempo), memorizamos las instrucciones y es posible hacerlo solos. El profesor de Palas Athena refuerza que no hay una respuesta sobre cuánto tiempo lleva aprender a meditar, porque algunas personas tienen una inclinación natural a los estados de atención, mientras que otras son más dispersas mentalmente.
La autocrítica es la peor enemiga de este proceso. Si intentaste mantener la atención plena por 3 minutos, cuenta cuántas veces te distrajiste durante ese tiempo y, la próxima vez que medites, intenta disminuir”, afirma el profesor de Palas Athena.