¿La piel de mi rostro ha mostrado signos de cansancio al despertar? Este período de aislamiento social ha alterado el sueño de muchas personas, pero un simple drenaje facial puede devolver la sensación deseada de bienestar, así como recuperar la vitalidad de la piel.
Esta técnica de masaje facial manual, es ideal para despedirse de la hinchazón de la cara, liberar toxinas y tonificar la piel. Sólo necesita tomarse unos minutos y prestar atención al momento del auto masaje. ¡Es hora de optimizar el cuidado y sentir todos los beneficios en su propia piel!
Beneficios del drenaje facial
El drenaje facial es una técnica que tiene como objetivo estimular y optimizar las funciones del sistema linfático, una red de vasos que mueven los fluídos de los tejidos del sistema circulatorio y ayudan a la inmunidad del cuerpo. Esta técnica también es responsable de eliminar toxinas, activar la circulación sanguínea y promover la relajación de los músculos faciales, reduciendo la hinchazón.
Patricia Tobo, gerenta científica de bienestar de Natura, enfatiza la importancia del método: “El drenaje linfático estimula una mayor oxigenación de los tejidos faciales, mejorando la apariencia de la piel del rostro. Sus movimientos ayudan a reducir la hinchazón y promueven la relajación. Por esta razón, es un gran aliado de la rutina del cuidado de la piel, especialmente cuando se asocia con cosméticos antienvejecimiento, antioxidantes y humectantes ”.
A diferencia de los masajes faciales que actúan exclusivamente sobre los signos de la edad y, por lo tanto, recurren a movimientos ascendentes; el drenaje hace uso de movimientos hacia abajo. Esta es la dirección recomendada para limpiar los canales linfáticos. La técnica no tiene contraindicaciones y se puede hacer en cualquier momento del día, de 2 a 3 veces por semana.
¡Es hora del spa en casa!
Para obtener los mejores beneficios del drenaje facial, primero intente hacerlo en un ambiente relajante en casa. Si puede, use un difusor de habitación con olor fresco y elija una canción de su elección como sonido ambiental. Baje la luz artificial, siéntese cómodamente, cierre los ojos y respire profundamente tres veces seguidas. Esto te ayudará a conectarte con el momento presente y desconectarte de todo lo que te rodea.
¿Listo? Entonces, ahora, ¡solo seguí el paso a paso!
Paso 1: prepará la piel
Después de limpiar la piel, aplicá una crema hidratante y el cuello. Una buena opción es Chronos Acqua Biohidratante. Tiene una fórmula ligera y refrescante, así como una tecnología de hidratación activa, prebiótica e inteligente, que activa los cinco mecanismos autohidratantes de la piel, mantiene el equilibrio de la microbiota y repara los niveles de hidratación según las necesidades de cada región de la cara.
Es la crema hidratante facilitará el deslizamiento de los dedos durante el masaje, mejorando sus efectos.
Paso 2: despertá los ganglios
1. Para comenzar, coloque las dos manos planas sobre las mejillas y aplique una ligera presión en el área.
2. Usando los tres dedos medios de la mano derecha, presione la base izquierda del cuello, cerca de la clavícula. Luego sube un poco hacia el centro y luego más alto, justo debajo de la mandíbula. Cada presión debe durar tres segundos. Repita los movimientos tres veces seguidas.
3. Ahora, reproduzca esta misma secuencia en el lado derecho del cuello, usando los tres dedos medios de la mano izquierda.
Paso 3: direccióna tus movimientos
1. Con las yemas de los dedos de ambas manos, promueva un deslizamiento lento y suave, comenzando en la barbilla y terminando en las clavículas, recorriendo todo el cuello, de arriba a abajo. Haga este ejercicio tres veces seguidas.
2. Una vez hecho esto, coloque las puntas de los tres dedos medios de ambas manos en la frente, promoviendo el encuentro entre ellas. Luego, deslícelos hacia el frente de las orejas, por el costado de la cara. Esta secuencia también debe realizarse tres veces seguidas.
3. Ahora, con los dedos medio e índice, haga movimientos circulares y lentos, desde el centro de la frente hasta la barbilla, masajeando todo el lado de la cara. Termine deslizando los dedos en un movimiento continuo hacia abajo hasta la base del cuello. Repite tres veces.
